sábado, 28 de marzo de 2015

Muere un motociclista


En Guadalajara, Jalisco, hacia mediados del decenio de 1980, un sábado, un adolescente secundariano de apellido Mantecón, quien vivía en la colonia Independencia (Independencia Oriente me parece, ya que esta colonia tiene tres secciones: Independencia Oriente, Independencia, e Independencia Poniente), se levantó muy temprano, y determinó poner fin a semanas de desidia: decidió reparar su motocicleta, digamos que hacia las 7:00 am la sacó a la cochera, llevó la herramienta necesaria e invirtió algo de sus conocimientos sobre mecánica, tiempo, y trabajo.




La arregló, desayunó, y salió a pasear en su moto. Encontró la muerte cuando fue atropellado por una unidad combinada tractocamión-tráiler (conocida en México como tráiler, solamente). La pesada unidad y la moto se desplazaban paralelamente, de oriente a poniente por la avenida Circunvalación Doctor Atl, y al llegar a la esquina con Calzada Independencia Norte —donde ahora hay una licorería llamada Súper La Playa; en el decenio de 1970 en ese lugar estaba al autobaño Apolo XI, y tal vez en el tiempo del accidente ahí era un lote baldío, ya que La Playa no se instaló ahí enseguida de que el dueño del autolavado, un señor Paco, hubo vendido su valiosa esquina noreste, sino años después— ambos dieron vuelta a la derecha, hacia el norte. La moto del adolescente iba muy cerca del machuelo de concreto, no alcanzó a pasar, fue atropellada y el jovencito falleció.





El adolescente gustaba de correr en su moto, sentir el fuerte golpe del viento en el rostro, acelerar, acelerar, acelerar... murió lleno de sueños y proyectos. En aquellos años las leyes de Tránsito o Vialidad o Movilidad no eran tan estrictas o tan protectoras (usar casco, por ejemplo...). Desde aquí, espero que Dios Nuestro Padre le haya concedido o le conceda en algún momento el privilegio de gozar de su Gloria.

Descanse en paz.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.